Así... como el perfume de las flores
alas de gorrión levantó el vuelo,
se apagaron el eco de tus pasos
se apagaron las luces de mis sueños.
! No me digas adiós cuando el sol muere ¡
de cobarde sin duda es por completo,
de frente, sí, mirándome a los ojos,
es justo, más leal, y más lo entiendo.
Yo pienso que te vas y ya te llamo,
me derrumba el dolor y el sufrimiento,
porque decir adiós es una espada
que clavada en mi pecho tengo dentro.
De nada valen ya, mi pena y llanto,
mis angustias por ti, van sin consuelo...
mis caricias, mis lágrimas vertidas ´
corrieron para ti, tupido velo.
¡Sí… amor, amor, es mi alma la que grita!
¡ No me dejes amor, llévame lejos,
seré... lo que tú quieras en la vida,
esa vela, desplegada a los vientos,
barco en el mar, mecido por las olas;
ni lo sabrás que me muero queriendo
! No me digas adiós, cuando el sol muere ¡
llévame, soy etérea y poco peso.
Presiento que te vas de mí alejando
de pena entre suspiros yo me muero,
mil te quiero de amor te dan mis ojos
los tuyos a los míos, miran… lejos,
en tus manos encuentro gestos vagos,
y el tacto de tus dedos frío siento,
yo quisiera dormirme para siempre...
con un sueño de amor… y en ese sueño,
escucharte decir que aún me quieres
y decirte muy quedo que te quiero;
! No me digas adiós… cuando el sol muere ¡
¡ No… no… ¡
¡ No me digas adiós… porque me muero ¡
alas de gorrión levantó el vuelo,
se apagaron el eco de tus pasos
se apagaron las luces de mis sueños.
! No me digas adiós cuando el sol muere ¡
de cobarde sin duda es por completo,
de frente, sí, mirándome a los ojos,
es justo, más leal, y más lo entiendo.
Yo pienso que te vas y ya te llamo,
me derrumba el dolor y el sufrimiento,
porque decir adiós es una espada
que clavada en mi pecho tengo dentro.
De nada valen ya, mi pena y llanto,
mis angustias por ti, van sin consuelo...
mis caricias, mis lágrimas vertidas ´
corrieron para ti, tupido velo.
¡Sí… amor, amor, es mi alma la que grita!
¡ No me dejes amor, llévame lejos,
seré... lo que tú quieras en la vida,
esa vela, desplegada a los vientos,
barco en el mar, mecido por las olas;
ni lo sabrás que me muero queriendo
! No me digas adiós, cuando el sol muere ¡
llévame, soy etérea y poco peso.
Presiento que te vas de mí alejando
de pena entre suspiros yo me muero,
mil te quiero de amor te dan mis ojos
los tuyos a los míos, miran… lejos,
en tus manos encuentro gestos vagos,
y el tacto de tus dedos frío siento,
yo quisiera dormirme para siempre...
con un sueño de amor… y en ese sueño,
escucharte decir que aún me quieres
y decirte muy quedo que te quiero;
! No me digas adiós… cuando el sol muere ¡
¡ No… no… ¡
¡ No me digas adiós… porque me muero ¡