¡ No sé si fue la primavera clara
la que llenó mi noche de alegría,
la que trajo hasta mí la sombra parda
de recuerdos profundos que dormían !
Recordando mi playa tan dorada
y el batír ondeante en lejanía;
si... de Ayamonte mi alma enamorada,
con viento en caracolas me fundía.
¡ No pienses que olvidé ciudad amada
con tu nombre mis versos escribía,
ni tu mar ... del color de la esmeralda
he podido olvidarlo todavía !
Si... te he llevado muy dentro de mi alma,
con tu cielo, arenales y tu brisa,
y tu río llamado Guadíana
lo recuerdo en mis sueños con sonrisas.
Mi Ayamonte querido, en mis baladas
y al respirar tus aires de salinas...
siento fuerte de ancestros la llamada
¡ Mis raices que son ayamontinas !
Noches bellas por dónde el faro pasa
esa estela brillante y encendida,
ventanal celestial de aguas saladas
hablando de mi tierra tan querida.
¡ No sé si fue la primavera clara
la que llenó mi noche de alegría,
la que trajo hasta mí, la sombra blanca
de recuerdos profundos que dormían !
CANELA.